SIN
SER EGOÍSTAS, D. MANUEL,
UN POQUITO PARA CADA UNO…
Como debe ser, sin egoísmos, un
poquito para cada uno. Hoy una denuncia para uno, mañana una demanda para otro,
pasado una imputación para aquel otro, etc. Así, muy bien, todo bien repartido,
porque lo bien repartido, bien queda. Como dicen en la iglesia, juntos en lo
bueno y en lo malo. Sí, ya sé que vosotros siempre intentáis estar en lo bueno,
que lo malo ya nos lo podemos repartir entre el resto de los ciudadanos, que de
esa forma tocamos a un poquito de mierda nada más. Cuanta bondad.
Hace unos días desayunábamos con
tu tercera imputación, cuan grande eres, y nosotros si darte la consideración
que te merecías desde hace muchos años, yo lo siento.
Sin embargo, tú, como buen
samaritano, sí has querido repartir esta imputación con tus más allegados, es
decir, tus más fieles escuderos. En este caso les ha tocado el premio a un técnico
municipal y a tu mejor discípulo, D. Andrés Rodríguez, insigne concejal de
urbanismo. Hoy te ha tocado a ti Andrés, ya ves, un poquito para cada uno. Lo
que ocurre es que puede ser más que posible que a ti se te acumulen las causas
por querer ostentar cargos para los que no estabas preparado. Siempre he
pensado que cuando se nombra a alguien para un cargo tiene que haber una
justificación y no debe ser otra que se trate de la persona más idónea para
ello. En tu caso creo que no, presuntamente, claro. Porque no creo que haya
alguien en este pueblo que pueda entender que se sitúe como concejal de
urbanismo a una persona que parece vivir en la época del adobe. Porque así
diste tus primeros pasos en el consistorio, a golpe de querer arreglar las
cosas de urbanismo como antaño, entre coleguitas, hasta que te llevaste el
primer susto. Era aquello a lo que estabas acostumbrado, no solo tú, así nos
tenían a casi todos. Recalificación por aquí, trapicheo por allá, todo si les
seguías el rollo. Y tú, como no, a seguir la tradición del jefe. Los
arreglillos de poca monta se los arreglas a la vieja usanza y los de mayor
calado ya te los dan hechos las grandes esferas, tú solo tienes que firmar.
Pero solo son pequeños detalles sin importancia ¿verdad? Y ahora parece que la
gente te quiera lapidar, que malos son ¿no? Y, sin embargo, ahí sigues, será
porque lo estás haciendo muy bien, o no, o por… vete tú a saber, eso lo va a ir
diciendo la justicia. Quizás lo hayas hecho tan bien como tu exjefe, pero tú continúas
y tu jefe asciende a secretario general de la consejería de educación, ves,
casi lo mismo. Bueno, quizás la única diferencia estribe en que él sí ocupa un
puesto en algo para lo que ha estudiado. El caso es que, egoístamente, habría
preferido que siempre hubiera estado donde está y así no tendríamos que haberlo
sufrido en este pueblo. Lo peor es que lo hubiera sufrido más la educación de
la región, aunque no sé si ya la podría empeorar aun más.
Pero en lo que sí os vais a
parecer en que vais a cambiar los paseos por los pasillos del ayuntamiento por
los pasillos de los juzgados, es lo que tiene fiarse de quien se busca la vida
“por encima de tus posibilidades”.
Un solo apunte por si alguien que
no conozca Archena lee este panfleto. Aclarar que este pueblo debe rondar los
20.000 habitantes, sí, aunque parezca raro. Y digo raro porque, entre todos
estos habitantes, estoy más que seguro que se podría sacar un equipo de
personas que nos representara, estando sobradamente preparadas para ello, es
decir, con más calidad…
Pero tranquilo, seguro que te
queda poco que sufrir en ese convento. Quizás las próximas romerías en las que
veamos a más de uno sean esas en las que se procesiona por los juzgados, es
solo cuestión de una buena auditoría, solo eso, ya ves. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario