TRIBUNA SOCIALISTA

Mientras ex ministros y ex jetas socialistos se afanan en joder la procesión con sus inoportunas, improcedentes y totalmente fuera de lugar declaraciones, diciendo que su partido debe suicidarse mediante un “acto de sacrificio patriótico” para hacer presidente de nuevo al ínclito Mariano, don Rajoy, todos sabemos ya, que se trata únicamente de salvar “sus muebles”, esos chollos rotatorios que han ido consiguiendo mientras nos vendían de poco en poco. Como decía, mientras estos caraduras abogan por mantener sus poltronas a costa de lo que sea, aunque se trate de finiquitar su propio partido, ese que dice llamarse Obrero y Socialista, a pesar de que de obrero no le queda nada y de socialista solo tiene algo así como la ideología de nuestro querido Tovar. Paralelamente a ellos aparecen nuevas voces en el seno del partido, convenientemente silenciadas, o aburridas ya algunas, que piden un cambio de 180 grados, tanto a nivel generacional como ideológico. Estos chicos, nacidos a la izquierda de Izquierda Socialista, la cual entiendo algo dormida en estos momentos, vienen pisando muy fuerte. No se dejan camelar con las tonterías de lealtad al partido y a los sacrificios por España y sí que se han encargado de plasmar un ideario con una serie de propuestas programáticas muy cercanas a las de Podemos, presentando una recogida de firmas y una carta (junto a Izquierda Socialista) de militantes para que los órganos de su partido se encarguen de decir NO al PP, impidiendo cualquier tipo de gobierno conservador y que se estudie su programa junto a otras fuerzas progresistas. Proponen que el partido se deshaga de todas las presiones que pretenden convertirle en un peón de los enemigos de los derechos sociales y de las libertades públicas y no caer en los estériles enfrentamientos entre las fuerzas progresistas de izquierda ya que, durante la última campaña, se han dedicado más fuerzas a luchar contra Podemos que contra el PP, el auténtico baluarte de las políticas antisociales y contrarias a la defensa de las libertades públicas. E incluso muchas voces criticando a su candidato.

 Por todo ello, han pedido a su Comité Federal:

1º.- Plan de empleo y recuperación de sanidad, enseñanza, justicia y otros servicios públicos.

2º.- Derogación de las reformas laborales, del artículo 315.3 del Código Penal.

3º.- Restablecimiento de las libertades.

4º.- Derogación de la LOMCE y el 3+2.

5º.- Aprobación de leyes que garanticen la igualdad efectiva entre hombres y mujeres tanto en el plano social como laboral. Combatir el terrorismo machista con una ley integral que acabe con esta lacra social.

6º.- Reforma local que ponga las bases de la autonomía municipal.

7º.- Reformas constitucionales, en base a propuestas que promuevan la laicidad, fortalezcan la cohesión social y territorial  y que reconozcan en un marco federal las diferentes identidades de los pueblos del estado español, incluyendo el derecho a decidir.

8º.- Derogación de la reforma del artículo 135 de la Constitución Española.

Creo que estos chicos se lo están currando mucho a pesar de las numerosas trabas con las que se están encontrando ya que la vieja guardia socialista no se atreve, o no quiere, este programa de mínimos, realista y muy social para comenzar a debatir un gobierno progresista, sin miedos y sin ambages.

¿Podemitas? No, solo socialistas de los buenos. Suerte y ánimo. Amén.